Mujer embarazada en estado vegetativo.

Una mujer en estado vegetativo se encuentra internada hace más 10 años en una clínica de Phoenix, en el Estado de Arizona, Estados Unidos. La mujer entró en coma, tras haber estado a punto de morir ahogada en el 2008.

Hasta la fecha, no se ha desvelado aún su identidad y se desconoce si tiene familia. Recibía atención constante en la habitación de la clínica de Phoenix, ‘centro Hacienda Healthcare’ donde ha transcurrido su vida los últimos diez años. Pero nadie pareció haberse percatado de que estaba embarazada y reaccionaron cuando la “escucharon gemir” y el pasado 29 de diciembre, con ayuda de las enfermeras del centro, dio a luz a un niño, que se encuentra en perfectas condiciones de salud.

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La policía ha abierto una investigación criminal para tratar de esclarecer las circunstancias que rodearon la concepción del niño, que necesariamente hubo de implicar una agresión sexual a una mujer vulnerable, incapaz de prestar consentimiento.

“Buscaremos una explicación completa de esta horrible situación”, declaró Gary Orman, directivo del centro, y se comprometió a reforzar “la seguridad de cada uno de los pacientes y de los trabajadores” del centro clínico de Phoenix.

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También el Departamento de Sanidad de Arizona ha reforzado las medidas de seguridad en el centro y ha emprendido una inspección de las condiciones en que se encuentran los pacientes en el ‘centro Hacienda Healthcare’, que cuenta con 74 camas, propiedad de una empresa que se define en su página web como “proveedor líder de servicios de salud especializados para niños y jóvenes médicamente frágiles o enfermos crónicos, así como aquellos con discapacidades intelectuales y de desarrollo”.

 La policía tomará muestras de ADN a los funcionarios de la institución e investigará a otros pacientes. El ‘centro Hacienda Healthcare’, que trata a unas 2.500 personas al año provenientes de todo el estado de Arizona, prometió en un comunicado cooperar con la policía. De momento no se han producido detenciones.

Familiares de otros pacientes manifestaron su ira ante la situación. “Estamos impactados”, dijo a la prensa Karina Cesena, que no se separa un instante de su hija de 22 años, hospitalizada en el centro.

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 La oficina del gobernador de Arizona, Doug Ducey, publicó un comunicado en el que califica los hechos de “profundamente preocupantes”. Hacienda HealthCare se ha convertido en proveedor de diversos programas en la zona de Phoenix que tratan a personas con enfermedades crónicas.